sábado, 12 de enero de 2008

Caminando hacia el frio matinal,
despertó llorando una tarde de verano.
No supo si estaba durmiendo o despierta,
pero finalmente sintiñó que no era ni lo uno ni lo otro.

Anadaba con una manta verde limón, con una manta que no era de ella, era de su abuela, se la había prestado una noche de calor en el norte suerño, como no tenía frio, no se la había puesto, ahora que la abuela ya no estaba se la ponia cada vez que el clima lo ameritaba.

estaba llorando por una perdida, no habia claridad respecto a qué, pero estaba llorando de alegría por una perdida que nunca supo que habia perdido.